Nave Chang'e 6 aluniza en la cuenca del Polo Sur-Aitken y comenzará a recolectar los primeros ejemplares de esa zona para enviarlos a la Tierra.
La anterior misión china sorprendió a los científicos al traer rocas mucho más jóvenes que las recolectadas por misiones anteriores estadounidenses y soviéticas.
La sonda Chang'e-6 de China se posó en la cara oculta de la Luna el domingo por la mañana, marcando un hito histórico al recoger muestras de esta zona raramente explorada, según anunció la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA).
Apoyada por el satélite retransmisor Queqiao-2, la combinación de módulos de alunizaje y ascenso de la sonda logró aterrizar con éxito en la Cuenca Aitken del Polo Sur, específicamente en un cráter de impacto conocido como la Cuenca Apollo.
Desde su lanzamiento el 3 de mayo, Chang'e-6 ha pasado por etapas clave como la transferencia Tierra-Luna, el frenado cerca de la Luna, la orbitación lunar y el descenso para el alunizaje. El 30 de mayo, la combinación de módulos de alunizaje y ascenso se separaron de los módulos de orbitador y retorno.
Huang Hao, experto espacial de la Corporación China de Ciencia y Tecnología Aeroespacial (CASC), explicó que la Cuenca Apollo fue elegida por su potencial científico y sus condiciones favorables para el alunizaje, incluyendo buenas condiciones de comunicación y un terreno relativamente llano, cruciales en la escarpada cara oculta de la Luna.
La sonda completará la toma de muestras en dos días, utilizando un taladro para recoger muestras del subsuelo y un brazo robótico para muestras superficiales. Jin Shengyi, otro experto de la CASC, detalló que se construyó un laboratorio de simulación para garantizar un proceso de toma de muestras sin problemas. Este laboratorio permite a los científicos desarrollar y verificar estrategias y procedimientos basados en las condiciones exactas del sitio de alunizaje.
Debido a la obstrucción lunar, la ventana de comunicación con la Tierra es más corta en la cara oculta, reduciendo el tiempo de toma de muestras de Chang'e-6 a 14 horas, comparado con las 22 horas de Chang'e-5. Para mejorar la eficiencia, el equipo ha hecho el proceso más inteligente, permitiendo a la sonda ejecutar instrucciones de forma autónoma, reduciendo así la necesidad de interacciones constantes con la Tierra.
Durante la misión de Chang'e-5 se enviaron cerca de 1.000 instrucciones desde la Tierra. Para Chang'e-6, se espera que esta cifra se reduzca a 400, gracias a la autonomía mejorada de la sonda.
Este logro no solo representa un avance significativo en la exploración lunar, sino que también abre nuevas oportunidades para la investigación científica en una de las áreas menos comprendidas de nuestro satélite natural.
Referencia: spanish.news.cn| 2024-06-02 08:18:30