Otra vida es una de las apuestas de la plataforma NETFLIX por captar a los amantes de la ciencia ficción y las historias de los viajes espaciales.
La serie protagonizada por la actriz Katee Sackhof, nos introduce en la historia de la comandante Niko Breckinridge, quien tiene la misión de dirigir un viaje interestelar para descubrir el origen de un artefacto alienígena que ha caído a la Tierra.
Otra vida y los giros de sus subtramas
La estructura de la serie Otra vida se divide en dos subtramas: una que se desarrolla en la nave espacial con la tripulación del Salvare (nombre de la nave interestelar), y otra que transcurre en el planeta Tierra con un grupo de investigadores (entre los que se encuentra el esposo de la comandante), intenta descubrir la verdadera naturaleza del objeto extraterrestre.
La serie recuerda por momentos a otras producciones como Gravity (2013) o Interestelar (2014), por los factores que se entremezclan, y que a veces dejan más dudas que respuestas en los espectadores.
Serie “Otra vida”: crítica a otra de las apuestas de NETFLIX por la ciencia ficción
En principio, es una oferta distinta que nos presenta a personajes que tenían potencial para desarrollarse con más profundidad como la comandante Niko Breckinridge (que seguramente muchos recuerdan por su papel en Battlestar Galactica); Erik Wallace, investigador y esposo de la comandante, Sasha Harrison que da vida a la representación diplomática del gobierno a bordo de la nave y el influencer Harper Glass, que es uno de los personajes que busca darle un toque de seriedad a la serie.
Pero si bien el elenco de personajes se muestra variado e interesante en inicio, las interpretaciones no destacan especialmente.
Aunque la interpretación de William, la entidad holográfica de inteligencia artificial de la nave resulta original. Y la comandante Breckinridge y sus reacciones emocionales ante la manera en la que la tripulación cuestiona su autoridad destacan entre otras actuaciones del elenco en algunas escenas.
Y a medida que va transcurriendo la serie, vemos cómo los personajes se enfrentan por una parte, al drama de la nave y el liderazgo de la comandante que es puesto en tela de juicio en más de una ocasión.
Mientras que en la Tierra, los investigadores se esfuerzan por descubrir más del artefacto alienígena y lidiar con los problemas de seguridad, así como las interferencias de los medios periodísticos desde su llegada.
El error de viaje de emociones en Otra vida
Uno de los puntos que afectó a Another Life en su primera temporada fue la presentación de incógnitas que no terminaban de cerrar. Aunque este podría ser un detalle rescatable si se diera respuestas a varias preguntas en el futuro.
Serie “Otra vida”: crítica a otra de las apuestas de NETFLIX por la ciencia ficción
Pero sin duda alguna, uno de los principales desaciertos de la serie fue la evolución de sus personajes y la forma en la que fueron presentadas las relaciones entre ellos.
Algunos personajes buscaron apelar a un viaje de emociones para conectar con la audiencia, pero no terminaron de definirse de manera sólida. Y esto causa que en varias escenas los personajes no lleguen a sentirse memorables.
Y en realidad, las emociones y acciones de muchos de los personajes recuerdan a una trama juvenil. Pero con la diferencia que está ambientada en medio de una misión espacial mientras el mundo se enfrenta a una amenaza extraterrestre.
Son actuaciones que representan a jóvenes inexpertos que se embarcan en una misión de vital importancia para la humanidad y que está llena de riesgos. Y que comenten el error de banalizar algunas situaciones con el fin de conectar con un público más joven.
Otro aspecto que influyó de manera negativa fue el exceso de exabruptos y un par de situaciones fuera de contexto que en algunas ocasiones causaban cierta confusión, por no ser acordes al momento.
Además de que en más de una ocasión durante la primera temporada se cae excesivamente en el recurso de no entrar en explicaciones para la lógica de usar cascos espaciales en otro planeta o entrar en detalles sobre la exploración del espacio.
Una segunda temporada para Otra vida a la que faltan algunos condimentos
La segunda temporada de Otra vida atrajo a los espectadores que buscaban respuestas acerca de presencia extraterrestre en la Tierra, que impulsa a viajar a toda una tripulación al espacio.
Desde la primera temporada, se venían tejiendo los elementos para la evolución de sus protagonistas y las decisiones que debían tomar para hacer frente a la amenaza durante el viaje.
Pero a pesar de que la serie presentara todos los elementos para un drama con giros en la evolución, parecen faltar algunos condimentos que restan un poco de fuerza a su guion.
La dinámica por la que sigue apostando Otra vida en su segunda temporada es la de crear un espejo en el que se reflejen tensiones al estilo del hilo de otras tramas espaciales. Y los hilos que mantiene Another Life desde su primera temporada, recaen en las historias de la comandante Breckinridge.
Serie “Otra vida”: crítica a otra de las apuestas de NETFLIX por la ciencia ficción
Esta estrategia del guion y las dudas que son dejadas en cada capítulo hacen que el peso de la trama pierda un poco de fuerza. Sobre todo, porque muchos acontecimientos no parecen evolucionar hacia una respuesta totalmente clara.
Sin embargo, la combinación de incógnitas relacionados con el espacio y la ambientación de escenarios hacen que las críticas se encuentren divididas, entre quienes a pesar de algunos hilos flojos de trama, valoren la mezcla de viajes al espacio con toques de terror.
Y por los momentos no se ha anunciado una cancelación y el público se encuentra a la espera del anuncio de una tercera temporada que podría servir como un cierre a la trama.
Así que si te interesan las tramas de viajes especiales y quieres ver un poco de las apuestas de ciencia ficción de este año, Otra vida puede ser una opción para pasar un fin de semana con una serie con algunos planos interesantes y una ambientación espacial con algunos exabruptos en las que el destino de la Tierra está en juego.