El telescopio espacial James Webb es capaz de atravesar las nubes de polvo que tapan las formaciones estelares, y lo demuestra con estas nuevas imágenes de infarto.
Una delicada tracería de polvo y cúmulos estelares brillantes atraviesa esta imagen del Telescopio Espacial James Webb de la NASA / ESA / CSA. Los brillantes zarcillos de gas y estrellas pertenecen a la galaxia espiral barrada NGC 5068, cuya barra central brillante es visible en la parte superior izquierda de esta imagen. NGC 5068 se encuentra a unos 17 millones de años luz de la Tierra en la constelación de Virgo.
Este retrato de NGC 5068 es parte de una campaña para crear un tesoro astronómico, un repositorio de observaciones de formación estelar en galaxias cercanas.
Estas observaciones son particularmente valiosas para los astrónomos por dos razones:
La primera es porque la formación estelar sustenta muchos campos en astronomía, desde la física del tenue plasma que se encuentra entre las estrellas hasta la evolución de galaxias enteras. Al observar la formación de estrellas en galaxias cercanas, los astrónomos esperan poner en marcha importantes avances científicos con algunos de los primeros datos disponibles de Webb.
La segunda razón es que las observaciones de Webb se basan en otros estudios que utilizan telescopios, incluido el Telescopio Espacial Hubble de la NASA / ESA y algunos de los observatorios terrestres más capaces del mundo.
Webb recopiló imágenes de 19 galaxias cercanas de formación estelar que los astrónomos pudieron combinar con catálogos del Hubble de 10.000 cúmulos estelares, mapeo espectroscópico de 20.000 nebulosas de emisión de formación estelar del Very Large Telescope (VLT) y observaciones de 12.000 nubes moleculares oscuras y densas identificadas por el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA). Estas observaciones abarcan el espectro electromagnético y brindan a los astrónomos una oportunidad sin precedentes para reconstruir las minucias de la formación estelar.
Con su capacidad para mirar a través del gas y el polvo que envuelven a las estrellas recién nacidas, Webb es el telescopio perfecto para explorar los procesos que gobiernan la formación estelar. Las estrellas y los sistemas planetarios nacen entre nubes arremolinadas de gas y polvo que son opacas a las observaciones en luz visible, como muchas del Hubble o el VLT. La aguda visión en longitudes de onda infrarrojas de dos de los instrumentos de Webb, MIRI y NIRCam, permitió a los astrónomos ver a través de las gigantescas nubes de polvo en NGC 5068 y capturar los procesos de formación estelar a medida que ocurrían. Esta imagen combina las capacidades de estos dos instrumentos, proporcionando una visión verdaderamente única de la composición de NGC 5068.
Referencia y foto de l portada: Una imagen cercana de una galaxia espiral, que muestra su núcleo y parte de un brazo espiral. Se pueden ver miles y miles de pequeñas estrellas que lo componen, más densas en una barra blanquecina que forma su núcleo. Grupos y filamentos de polvo forman una estructura casi esquelética que sigue el giro de la galaxia y su brazo espiral. Grandes y brillantes burbujas de gas rojo están ocultas en el polvo. Crédito: ESA/Webb, NASA & CSA, J. Lee y el equipo PHANGS-JWST