Hoy se cumplen 39 años de su lanzamiento, el 8 de noviembre de 1984, desde el Centro Espacial Kennedy en Florida.
Fue la segunda misión del transbordador espacial Discovery.
La misión STS-51-A se destacó como una de las más notables debido a su tarea única de recuperar satélites defectuosos en órbita y devolverlos a la Tierra.

La Misión STS-51-A: Recuperando Satélites en el Espacio
El programa del transbordador espacial de la NASA fue una de las empresas espaciales más impresionantes y ambiciosas de la historia. Entre las numerosas misiones de los transbordadores, la STS-51-A se destacó como una de las más notables debido a su tarea única de recuperar satélites defectuosos en órbita y devolverlos a la Tierra para su reparación y reutilización. En este artículo, exploraremos la emocionante misión STS-51-A y su impacto en la exploración espacial.
Preparándose para el Despegue
La STS-51-A, parte del programa del transbordador espacial, fue lanzada el 8 de noviembre de 1984, desde el Centro Espacial Kennedy en Florida. La tripulación del transbordador espacial Discovery estaba compuesta por los astronautas Frederick Hauck, David M. Walker, Joseph P. Allen, Anna Fisher y Dale Gardner, quienes estaban ansiosos por embarcarse en una misión única en la historia de la exploración espacial.
El Objetivo de la Misión
La misión STS-51-A tenía un objetivo claro y valiente: recuperar dos satélites de comunicaciones defectuosos en órbita terrestre y traerlos de vuelta a la Tierra. Los satélites, denominados Palapa B-2 y Westar VI, habían sido lanzados previamente, pero habían experimentado fallos en sus sistemas de propulsión que los dejaron en órbitas inutilizables.
La recuperación de satélites en órbita era una tarea nunca antes intentada y requería una coordinación precisa, habilidades de astronautas altamente capacitados y la capacidad de manipular objetos en el espacio. La tripulación del Discovery estaba preparada para asumir este desafío técnico.
El Despliegue de la Misión

La STS-51-A fue un ejemplo de trabajo en equipo y valentía. El equipo de astronautas utilizó el brazo robótico del transbordador espacial para capturar los satélites y luego los almacenó en la bodega de carga del Discovery. Una vez asegurados, los satélites defectuosos fueron llevados de regreso a la Tierra, donde pudieron ser reparados y luego relanzados con éxito para continuar brindando servicios de comunicación.
La misión se completó con éxito, marcando un hito importante en la capacidad de los astronautas para realizar reparaciones y recuperaciones de satélites en el espacio. Además, demostró la versatilidad de los transbordadores espaciales y su papel en el mantenimiento y mejora de la infraestructura espacial.
Legado y Significado

La STS-51-A dejó un legado significativo en la exploración espacial. Esta misión demostró que la tecnología espacial podía ser reutilizada y que los satélites defectuosos podrían ser recuperados y puestos nuevamente en funcionamiento. Esto representó un ahorro significativo de recursos y allanó el camino para futuras misiones de reparación en el espacio.
Además, la STS-51-A resaltó la valentía y la habilidad de los astronautas de la NASA, quienes llevaron a cabo tareas complejas en un entorno hostil. La misión ilustró la importancia de la cooperación, el ingenio y la dedicación en la exploración del espacio.
En resumen, la STS-51-A es un recordatorio inspirador de los logros de la exploración espacial y la capacidad de la humanidad para superar desafíos aparentemente insuperables. Esta misión histórica sigue siendo un hito en la historia de la NASA y un testimonio del espíritu de descubrimiento que impulsa a la humanidad hacia las estrellas.